El Rincón del Profesional: Castillo de Almodóvar y Teresa Moreno González - Ceremonials
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El Rincón del Profesional: Castillo de Almodóvar y Teresa Moreno González

Castillo de Almodóvar Teresa Moreno

El Rincón del Profesional: Castillo de Almodóvar y Teresa Moreno González

Tras la Semana Santa retomamos nuestro rincón del profesional con El Castillo de Almodóvar y parte de su alma, la subdirectora Teresa Moreno González.

La fecha elegida para esta publicación, no es una feCastillo de Almodóvar Teresa Morenocha al azar, y es que hoy hacen exactamente 8 años que yo entré a trabajar en el Castillo de Almodóvar, como responsable de eventos. A finales de 2016, dejé, con todo el dolor de mi corazón, esta gran aventura y fue su gerente, D. José María Cabrera Altolaguirre, del que hablaré más adelante, quien me dio parte de la idea para empezar con Ceremonials by Pilar Egea.

Soy una enamorada más de esta fortaleza, construida sobre un cerro que se puede divisar desde Córdoba Capital. Es impresionante para los invitados de una boda, el irse acercando al Castillo de Almodóvar y verlo, ya desde lejos, iluminado.

Teresa Moreno González, que estudió Gestión Empresarial nada más y nada menos que en Bélgica, es una persona con una gran vocación de servicio,  siempre sonriente y amable, las opiniones de bodas.net lo dicen todo, aquí podría terminar mi entrada de hoy.

Aunque tras haber trabajado varios años en el Castillo de Almodóvar y haber celebrado muchísimos eventos ya conocía bastante bien la fortaleza, reconozco que ha sido un auténtico placer dar una vuelta de nuevo por el Castillo de la mano de mi guía, Teresa. Veamos cómo sería tu boda en este lugar tan idílico.

Nada más llegar a la falda del Castillo, tienes una gran esplanada donde dejar tu coche o para que los autobuses que vengan desde distintos puntos, puedan dejar a los invitados. Y ya te están esperando los microbuses, para hacer la subida al Castillo, uno por cada 100 personas invitadas. En este parking bajo hay, durante todo el evento, una persona encargada de su vigilancia. Esta persona está en continua comunicación con el Castillo, dando parte de todas las eventualidades que puedan suceder (una ventanilla o puerta mal cerrada, unas luces que se olvidaron apagar…)

Castillo de Almodóvar

Subida al Castillo de Almodóvar

En la parte alta del Castillo, hay reservado sitio para 6 plazas de coche autorizados por los novios, para que puedan subir. Estas plazas suelen estar reservadas, para los novios, padres y padrinos y ciertas personas muy cercanas o con movilidad reducida. Aquí, a la subida, suele estar también esperando parte del equipo, para ayudar a dar la vuelta a los microbuses y atender a los invitados a la llegada.

Y si ya habíamos alucinado con la maravillosa vista del Castillo iluminado desde lejos y desde la falda de la montaña, con las vistas espectaculares, que vas teniendo según subes a la cima… ahora comienza el cuento de hadas…

Puerta de Entrada

La puerta de entrada al Castillo flanqueada por dos antorchas, ya anticipan lo que te vas a encontrar dentro, pero… Algo que siempre me ha llamado la atención y con lo que disfrutaba es que nada más poner el primer pie dentro del Castillo, comienzas a escuchar el hilo musical y percibes el aroma del mastranto. Sabemos que el olfato es el sentido de los recuerdos, años después de haber ido a una boda al Castillo de Almodóvar, cuando percibes ese aroma entre hierbabuena y menta, te viene el recuerdo de ese momento. Cuando trabajaba en el Castillo, me hacía gracia observar, cómo buscaban de donde salía ese olor tan característico y no se daban cuenta de que lo estaban pisando y que al pisarlo subía el aroma.

Pues bien, el mastranto y las antorchas son los que nos van a ir guiando hasta llegar a la zona de la Ceremonia Civil o del Aperitivo de Bienvenida. Acabamos de entrar en el Castillo y a mano izquierda tenemos otras tres antorchas, se han retirado o cubierto los paneles informativos, para no dejar nada al azar. Aquí se cuida el más mínimo detalle.

Subimos unas escaleras, y esta fue otra de las sorpresas con las que me encontré en esta visita, han hecho un arquito que lo están cubriendo con enredaderas con flores ¡Qué bonita foto tiene que tener cuando pasen los novios por ahí! Seguimos caminando y nos encontramos con otra portón flanqueado por otras dos antorchas, con sus llamas al viento y llegamos a una zona de subida, espectacular con 3 pendones a cada lado, sus 4 antorchas, sus maceteros con flores… Los cuatro carceleros, grandes faroles en el suelo, adornan aún más este rincón. Un sitio donde raro es el comensal que no se pare a hacerse una foto de pareja o de grupo.

 

Seguimos subiendo y nos encontramos con la zona lavanda, llamada así, ya que tiene un arriate entero de lavanda, nuevos aromas se entremezclan, el castillo sigue jugando con tus sentidos, la cuidada pared de enredaderas, los aromas, la música… y unas espectaculares vistas del pueblo y de la campiña. Otro rincón foto, pero en este Castillo, ¿Cuál no lo es?

Pasamos un pequeño túnel, que podemos adornar con velitas o pequeños farolitos y llegamos a la entrada al Patio de Albero, a ambos lados, en los arriates, 3 y 3 antorchas, los focos iluminan las paredes y aquí, de frente, si quieres hacer una ceremonia civil, encuentras un rincón único para hacerlo. Ya veo a la novia caminando por ese túnel, por ese pasillo de antorchas hacia la mesa de ceremonias.

Aquí termina el camino de mastranto y de antorchas, ya han cumplido su misión, nos han llevado directamente hacia el lugar donde se va a desarrollar toda la acción.

Una de las grandes cosas que tiene el Castillo, es que necesita muy poca decoración, aquí sí que el lema de menos es más se cumple, necesita muy poco, ya que un exceso de decoración taparía la piedra que con tanto mimo los propietarios y trabajadores se encargan de mantener.

En el Patio de Albero, el aperitivo de bienvenida, entre árboles, con una iluminación, que es suficiente para ver, pero romántica, que crea una magia especial para el desarrollo del evento. Un patio, que como su nombre indica es de albero, pero que no se te hunden los tacones, es un patio cómodo de caminar y de estar. Se cuidan todos los detalles, se tapan los cuadros de gas y luz tan necesarios para el desarrollo del evento, con pendones.

En un lateral, la preciosa capilla, octogonal, con la Virgen del Rosario patrona de Almodóvar, suele estar cerrada al paso, pero completamente iluminada, el altar con sus velas. Es una capilla desconsagrada, en la que en caso de lluvia, se puede celebrar el aperitivo de bienvenida junto con las demás dependencias interiores, en este caso, se cierran las cortinas del altar.

Con Teresa en la Puerta de la Preciosa Capilla

Para pasar a la zona de la cena y de la barra libre, entramos en las dependencias interiores, las galerías están decoradas con muchísimo gusto, con preciosos cortinajes y jarrones, es solamente una zona de paso o, en caso de lluvia, donde se celebraría el aperitivo de bienvenida juntocon la capilla y la biblioteca…

La Biblioteca, que maravilla de lugar, con grandes ventanales que dan a la plaza de armas, el exquisito artesonado del techo, que ahora se ve realzado por los pendones, el mobiliario… todo cuidado y mimado. Aquí es donde se puede hacer la ceremonia civil en caso de lluvia, donde se realizan los magníficos almuerzos medievales teatralizados…

Nos sentamos las dos y le pregunto un poco más a Teresa sobre su historia en el Castillo de Almodóvar, me comenta que comenzó a trabajar en el 2001, antes de que éste abriera sus puertas al público como lo conocemos hoy.

En febrero de 2013, se marchó, con todo el dolor de su corazón, ya que se lo dejaba en él. Es algo que pasa con el Castillo, por muy tomada que tengas la decisión, se queda con un pedazo de ti. Y marchó a Medina Azahara como coordinadora de grupos, venta de entradas e información del museo. No me extraña nada, Teresa, habla perfectamente 5 idiomas, flamenco, inglés, francés, alemán además del castellano.

Pero en el año 2016, en mayo, vuelve a unirse con el Castillo y ahí es donde estuvimos de compañeras por un tiempo. Vuelve, por no poder vivir más alejada del Castillo, vuelve por ser una trabajadora que el castillo no puede seguir teniendo alejada.

Plaza de Armas con la Torre del Homenaje al Fondo

De aquí pasamos a Plaza de Armas, impresionante siempre, con la Torre del Homenaje al fondo, la fuente, a mano derecha la entrada al Palacete Neogótico, en el suelo podemos ver las entradas a los dos aljibes, tan necesarios para un estado de sitio en una fortaleza, que jamás fue tomada al asalto.

Cuando yo trabajaba en el Castillo de Almodóvar, me encantaba cuando les contaba a los novios cómo podría ser su entrada a la cena por el paseo de guardia, el castillo a oscuras, solamente un cañón de luz los ilumina a ellos, hacer el brindis en la torre del homenaje y finalmente al bajar a a la plaza de armas, nada más poner un pie, como se iba a iluminar todo el Castillo. Los miraba a los ojos y veía como se les iluminaban, se estaban viendo, y tanto ellos como yo, ya sabíamos que se iban a casar allí.

En primavera, se pone la pérgola, para la lluvia y en invierno, por ahora, se pone la carpa, por el frío y la lluvia. Pero cuando más esplendoroso está el castillo es cuando en verano tienes de techo las estrellas.

Aquí se celebra la barra libre también, normalmente a los pies de la Torre del Homenaje, donde está la fuente, una maravilla la foto de esos novios en su primer baile con ese marco.

La entrada la Palacete Neogótico, suele ser donde se coloca la presidencia, ya que tienes un marco incomparable, se colocan velitas en las escaleras, se puede decorar con flores, si así lo quieres, aunque yo sigo pensando que en el Castillo menos es más. Esa escalinata que termina en unas preciosas vidrieras no necesita más decoración que unas velas.

Aunque hoy el rincón del profesional va sobe Teresa Moreno González, una trabajadora incansable, eficaz, amable, sonriente… No puedo dejar a ciertas personas muy importantes en el tintero.

D. Fernando de Solís y Tello y Doña Eva Morejón Márquez, propietarios y gestora del Castillo, incansables en darle todo el esplendor que se merece el Castillo de Almodóvar. Buscando siempre unificar la historia de la fortaleza con las últimas tecnologías. Doña Eva Morejón, desde que tomó las riendas de la gestión en septiembre de 2013, ha sido una enamorada del lugar, sabiéndolo transmitir a todos sus empleados.

D. José María Cabrera Altolaguirre, gerente del Castillo desde el año 2001, fue el que comenzó con la andadura del Castillo en su apertura al público, una persona con una capacidad de trabajo e intelectual fuera de lo normal, al que no se le escapa nada, además de llevar la gerencia de las fincas de la familia.

Doña Rocío del Pilar Aceña Balmón, directora del Castillo de Almodóvar, Rocío, otra parte del alma del Castillo de Almodóvar, nexo de unión entre todo el Castillo.

Doña Montserrat Pérez Sánchez, nuestra Montse, la paz del Castillo de Almodóvar, encargada de tienda, una persona dulce y amable, que te transmite tranquilidad y sosiego.

Don Antonio José Barrera Gallego, director de teatro, incorregible, divertido, responsable, nunca olvidaré las palabras tan acertadas que le dedicó un visitante: «es increíble, estás una hora pasándotelo en grande con él, y cuando terminas, has aprendido muchísima historia sin apenas darte cuenta»

Don Antonio Sánchez Moya, responsable de mantenimiento, ¡Qué decir de Antonio! trabajador incansable, que adora su trabajo, todos los caterings lo conocen y lo quieren, es una persona única y especial dentro del Castillo de Almodóvar.

Doña Manuela Sánchez Pérez, nuestra Manoli, casada con Alfonso Luna Gutiérrez, que fue el primer guía del Castillo y la cuarta generación en trabajar en el Castillo, ella es la encargada de que el Castillo esté como está, limpio y reluciente, es una hormiguita, siempre trabajando.

Doña Ana María Caballero Plazuelo y su marido Antonio Miguel Ramas Copete, Ramas, imprescindibles en los eventos, Ana María se encarga de la limpieza durante los mismos y de apoyar a Teresa en todo lo que los novios puedan necesitar, Ramas, es quien está vigilando el parking toda la noche.

Desde el primero hasta el último de los aquí nombrados, os llevo en mi corazón junto con el Castillo, todos me habéis enseñado y ayudado a ser la profesional que soy hoy en día. Solamente puedo decir que Gracias, Gracias y Gracias, ya que habéis hecho a y de «Ceremonials, Expertos en Cumplir Sueños»

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